10 mar 2015

CRÓNICA: INVERNESS HALF MARATHON

Tenía pensado empezar esta crónica dedicando la carrera a 2 personas pero no lo haré esta vez. Ambas están muy por encima de lo que pasó el Domingo aunque siendo sinceros, por muy bien que hubiera ido seguirían estándolo.

Sucede a veces que uno se prepara con todo, invierte tiempo, esfuerzo, renuncias y luego las cosas no salen como esperabas. ¿Qué le vamos a hacer? La vida está llena de decepciones. Hay a quien con darlo todo tiene suficiente. No es mi caso. Quizá porque aunque lo intento, nunca lo he dado todo. Tampoco estoy triste. Decepcionado aunque tranquilo quizás.

Fracasé este pasado fin de semana; por suerte no hay tiempo para lamentarse. Hay que seguir hacia adelante y a por lo próximo. Trabajar más, mejor y esperar que haya mejor suerte la próxima. De eso se trata.

Las previsiones meteorológicas para la carrera eran terribles pero de hecho el día no fue malo y más si lo comparamos con el año pasado o, sin ir más lejos con el día siguiente a la carrera en que sopló un viento increíble.

Pese a no encontrarme bien esa mañana y que no he podido entrenar cómodo estos últimos 3 meses decidí intentarlo y salir fuerte a ver si las piernas respondían. Y claro, no. Creo que me sentí bien los 2 primeros kms y fue ya al llegar al primer avituallamiento poco antes del km 5 cuando noté que las fuerzas me fallaban.

Es cierto que el perfil en esta parte "picaba hacia arriba" pero pasé algunos parciales rondando los 4:30min/km algo que no me pasaba desde hacía mucho, muchísimo tiempo. Incluso en el km10 (41:43) con dolores por todo el cuerpo paré para beber un poco y recuperar. Un calvario. El km 13 era cerca de mi casa y juro que en ese momento no encontraba motivos para seguir. Pero lo hice.

Tras un largo descenso esta vez sí con mucho aire en contra, encarábamos una larga recta de unos 3-4 kms con viento a favor intenté apretar el máximo posible y reducir el desastre pero no conseguí ir mucho más allá de los 4:10min/km. Luego claro, giro de 180º antes del km18 y viento en contra. Apreté los dientes, busqué darlo todo pero es que no había nada.

No sé si es como lo veo ahora pero esos 2 últimos kms hasta entrar en la pista de atletismo tampoco se me hicieron muy largos pese a todo. Los peleé, di la vuelta a la pista esperando que el desastre no fuera histórico... pero no lo conseguí: 1:31:00. No recuerdo cuándo fue la última vez que hice un tiempo así en una media y la verdad que de momento no me apetece mirarlo, pero sé que hace ya muchos años.

Se queda la espina clavada y claro, habrá que quitársela cuanto antes. Ya lo he dicho, toca entrenar más.