Desconfía de la gente que cae bien a todo el mundo. Hace trampa. Es algo que tengo claro desde hace bastante tiempo. No me fío. Y sé que no estoy descubriendo nada nuevo.
No descubro nada nuevo pero en el día a día veo otras cosas. Vivimos en permanentes trincheras, supongo que es mucho más fácil así: aquí los buenos, allí los malos y para adelante. Se me ocurren un montón de ejemplos de esto, pero que cada uno piense los suyos. Los hay a patadas.
Por suerte o por desgracia el mundo no es tan sencillo, está plagado de grises: gente extraordinaria que hace unas burradas inmensas y gente extraordinariamente desagradable que tiene detalles inmensos. Claro, ver estas cosas requiere fijarse y pensar pero eso requiere un esfuerzo y no siempre estamos dispuestos a ello.
Pero hay veces que la jodida realidad nos da así con la mano abierta en la cara y no te queda más remedio que abrir los ojos.
Y lo de Oscar Pistorius ha sido demasiado. Reconozco que soy de los que admiran a mucha gente. Tengo ese defecto: encuentro geniales algunas historias de gente muy poco recomendable y los admiro aún sabiendo lo que son.
Pero volvamos a Pistorius porque como digo ha sido demasiado. Es bien conocida mi admiración por alguien como él. Una cosa es que las personas a las que uno admira estén llenas de defectos y traiciones; pero para esto no alcanzan las palabras.
Mientras me caía la noticia como un jarro de agua fría y pensaba "no, no, no, Oscar, tu no" pensaba lo cruel que puede llegar a ser el éxito cuando se vuelve en tu contra, aquello de "más dura será la caída".
Para los que hemos tenido la inmensa suerte de pasar algún tiempo con las personas discapacitadas y creemos en la INTEGRACIÓN, Pistorius fue una demostración de que puede llegar a ser real. No es la única, pero si ha sido muy importante por lo mediática que ha sido y por hasta dónde fue capaz de llegar.
Sostengo desde hace tiempo que ayer fueron las mujeres y los negros; hoy son las personas discapacitadas los que tienen que luchar por sus derechos. Conozco, porque lo he discutido varias a gente a la que aprecio muchísimo que no está para nada de acuerdo con esto y no descarto que tengan razón y yo sea un exagerado, al fin y al cabo muchas veces me dejo llevar por la pasión; pero así lo siento. El tiempo dirá.
Pistorius se reveló. Se reveló y luchó muy por encima de cómo nos revelamos y luchamos hoy: escribir un par de hastagas y "retuitear" o "copiar en tu muro" un par de lemas cojonudos y adherirse a la causa. Él creo su causa, luchó por ella contra todo y contra todos hasta conseguirlo. Una vez lo consiguió, no se detuvo, siguió corriendo y está entre los mejores velocistas del mundo en una prueba de una dificultad tremenda (los 400 metros).
Todo eso es Oscar Pistorius, Pero Oscar Pistorius también es la persona que ha matado a su novia (a la espera de que la justicia sudafricana dicte sentencia sobre lo ocurrido) y ojalá no hubiera pasado lo que ha pasado.
Al final a mi me queda su lucha su ejemplo para llegar a Londres pero también sus errores por los que espero que se haga justicia.
A nosotros solo nos queda seguir luchando para que la integración acabe siendo una realidad y noticias como esta que encontraba ayer mientras intentaba escribir esto cada vez sean menos frecuentes.
Saludos!
