14 may 2015

NI TAN CERCA NI TAN LEJOS

Conocida es mi costumbre de usar el fútbol para propósitos descabellados y a la inversa así que bueno, estamos en esos meses en que las comparaciones salen solas.


Allá por el mes de Agosto tenía muy claros mis objetivos para esta temporada curso, así que cuando faltan 2 meses para acabar una etapa va siendo momento de preparar el balance de lo que ha sido, de saber dónde estoy y todas esas cosas que recomiendan los libros y que bueno, para que negar, yo siempre creí.

Voy a empezar confesando algo: cuando parece que todo va bien, razonablemente bien, crece en mi la convicción de que es solo una ilusión, todo pende de un hilo y un fallo, un solo fallo o una maldita casualidad que se cruce en mi camino, que incluso depende poco de mi basta para ver como todo cae cual castillo de naipes. Quizá ni siquiera caiga nada, pero así se siente.


Hace un mes y medio pensaba que si hubiese podido, me hubiese despedido a mi mismo con causa
justificada: no faltaba ni el trabajo ni el esfuerzo, pero debía fallar el método, es decir, yo mismo, ya que las cosas no estaban funcionando, el tiempo se acababa y los objetivos se alejaban. 

La realidad es que desde finales de Agosto y especialmente desde Noviembre hasta Abril con mis inevitables tropezones la sensación de progresar, de avanzar había sido muy significativa. Lo digo muchas veces: estaba en una dinámica positiva y como he dicho, se diluyó sin saber muy bien cómo. Pero supongo que estas cosas pasan.

Por suerte o por desgracia, no puedo despedirme a mí mismo y contratar a alguien mejor, así que no me ha quedado mas remedio que seguir conmigo mismo y seguir trabajando aunque hayan faltado las ganas.

Mirad, es mentira eso de que "cuando un hombre hace lo que puede no esta obligado a mas" o que intentarlo es una victoria. A mí por lo menos esto no me sirve. Para empezar yo nunca he hecho "todo lo posible" siempre hay algo mas que podía haber hecho y bueno, intentarlo esta bien, pero no lo es todo, ni mucho menos. Obvio.

Paso la crisis de Abril (si es que alguna crisis pasa alguna vez) igual que como llegó, sin tener ni la menor idea cómo.

Ahora dejo por escrito que siento que estoy esta bastante cerca de ser lo que hubiese querido que fuese hace 9 meses. La forma de llegar a ella quizá no ha sido la soñada: en mi cabeza "el juego" era mejor, sin tantos fallos, mucho mas vistoso pero la realidad (una vez mas) sabe más que yo: la primera semana de julio quizá sonría con la sensación de haber cumplido lo pretendido. Eso sí, lo que ya sé sin duda es que no voy a poder presumir, ni un poquito.

Y digo quizá porque pese a que la situación es buena, hace falta un segundo para que todo algo se venga abajo y ya ni sonreír pueda. Porque sí, porque pese a todo y con todo, sigo pensando lo mismo: aquí no se renuncia a nada, se va a por todo con todo. Y si se cae (Dios no lo quiera) no hay excusas. Hay errores.

Sigue habiendo un camino por delante.


¿Y hay algo mejor que ganar así? Lopo, Xisco y otros tantos nos han enseñado que no.

No hay comentarios: