Rick Hoyt nació en Massachusetts hace 43 años, con la nefasta suerte de sufrir una estrangulación con su propio cordón umbilical, lo que le produjo daños irreparables en el cerebro.
Los médicos le dijeron a su padre, Dick Hoyt, que el chico sería un vegetal toda su vida. Sin embargo, comforme pasaron los meses y los años, Dick se dio cuenta de que el chico los seguía con la mirada cuando estaban con él. Cuando cumplió 11 años, sus padres lo llevaron al departamento de ingeniería de la universidad de Tufts para preguntar si había algún medio de comunicarse con su hijo. Allí les dijeron que su cerebro estaba muerto.
Sin embargo, Dick les pidió que le contaran un chiste, tras lo cual el chico (Rick) sonrió. El cerebro estaba vivo. A partir de ahí Rick finalmente fue capaz de comunicarse usando un ordenador que le permitía controlar el cursor con un lado de su cabeza. Rick sorprendió a todos con sus primeras palabras, en lugar de decir "Hola, mamá", o "Hola, papá," lo primero dice Rick es: "Ve, Bruins!" Los Boston Bruins estaban en la final de la Copa Stanley esa temporada. Estaba claro desde ese momento, que Rick amaba los deportes y siguió el partido como cualquier otra persona.
A los pocos años, un compañero de clase quedó paralizado por un accidente de coche. La escuela entonces organizó una carrera para conseguir fondos. Rick quiso participar, y su padre, que nunca había corrido nada y su único deporte era el póker, lo intentó.
Ese día, la vida de Rick cambió. Escribió en su pequeño ordenador que cuando estaban corriendo (su padre empujando de su silla) tuvo la sensación de no ser un discapacitado. A partir de ese momento, Dick intentó proporcionarle a su hijo esa sensación todas las veces que pudiera.
De esta forma, el "Team Hoyt" (Dick y Rick) empezaron a participar en diversas pruebas atléticas (millas, medias maratones), entre ellas muchísimas maratones. Su mejor tiempo en maratón ha sido de 2h40min. Comenzaron también a participar en Ironmans.
Hace unos años, Dick sufrió un ataque al corazón durante una carrera. El ataque no fue muy fuerte, pero los médicos encontraron que una de sus arterias estaba obstruida al 95%. Si no hubiera estado tan en forma, probablemente hubiera muerto 15 años antes, le dijeron los médicos.
Los médicos le dijeron a su padre, Dick Hoyt, que el chico sería un vegetal toda su vida. Sin embargo, comforme pasaron los meses y los años, Dick se dio cuenta de que el chico los seguía con la mirada cuando estaban con él. Cuando cumplió 11 años, sus padres lo llevaron al departamento de ingeniería de la universidad de Tufts para preguntar si había algún medio de comunicarse con su hijo. Allí les dijeron que su cerebro estaba muerto.
Sin embargo, Dick les pidió que le contaran un chiste, tras lo cual el chico (Rick) sonrió. El cerebro estaba vivo. A partir de ahí Rick finalmente fue capaz de comunicarse usando un ordenador que le permitía controlar el cursor con un lado de su cabeza. Rick sorprendió a todos con sus primeras palabras, en lugar de decir "Hola, mamá", o "Hola, papá," lo primero dice Rick es: "Ve, Bruins!" Los Boston Bruins estaban en la final de la Copa Stanley esa temporada. Estaba claro desde ese momento, que Rick amaba los deportes y siguió el partido como cualquier otra persona.
A los pocos años, un compañero de clase quedó paralizado por un accidente de coche. La escuela entonces organizó una carrera para conseguir fondos. Rick quiso participar, y su padre, que nunca había corrido nada y su único deporte era el póker, lo intentó.
Ese día, la vida de Rick cambió. Escribió en su pequeño ordenador que cuando estaban corriendo (su padre empujando de su silla) tuvo la sensación de no ser un discapacitado. A partir de ese momento, Dick intentó proporcionarle a su hijo esa sensación todas las veces que pudiera.
De esta forma, el "Team Hoyt" (Dick y Rick) empezaron a participar en diversas pruebas atléticas (millas, medias maratones), entre ellas muchísimas maratones. Su mejor tiempo en maratón ha sido de 2h40min. Comenzaron también a participar en Ironmans.
Hace unos años, Dick sufrió un ataque al corazón durante una carrera. El ataque no fue muy fuerte, pero los médicos encontraron que una de sus arterias estaba obstruida al 95%. Si no hubiera estado tan en forma, probablemente hubiera muerto 15 años antes, le dijeron los médicos.
Saludos!
1 comentario:
http://blogs.que.es/22/2010/1/23/los-pro-vida-salen-ganar-superbowl
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